Coordenadas: 20&deg;42&#39; 50,3&#39;&#39; Latitud Sur/ 57&deg; 03&#39; 04,4&#39;&#39; Longitud Oeste. En la frontera argentina- brasile&ntilde;a, donde nada es m&aacute;s sencillo que&nbsp; ir de&nbsp;Paso de los Libres, provincia de Corrientes, a&nbsp;Uruguayana, estado de R&iacute;o Grande do Sul. A&nbsp;metros de los m&aacute;rgenes de un islote, del lado brasile&ntilde;o del R&iacute;o Uruguay. Sobre el lecho de un afluente del arroyo Imboa. En medio de un ambiente cuasi selv&aacute;tico de aguas turbias y de hasta tres metros de profundidad. <p style="text-align: center;">FUENTE: UFESE - CLARIN <p style="text-align: center;">&nbsp; All&iacute;, en ese &aacute;mbito hostil, podr&iacute;a estar el cuerpo de Cristian Schaerer (21), secuestrado hace 16 a&ntilde;os&nbsp;por una de las bandas m&aacute;s peligrosas de la Argentina liderada por Rodolfo &quot;El Ruso&quot; Lohrmann y Horacio &quot;El Potrillo&quot; Maidana, ambos detenidos&nbsp;en Portugal&nbsp; en 2016 y hoy a la espera de su extradici&oacute;n a Argentina. <p style="text-align: center;"> Salvo una desgarradora grabaci&oacute;n entregada a la familia como prueba de vida -previa al cobro de rescate de 277 mil&nbsp;d&oacute;lares- nada se supo de Cristian desde que sus captores se lo llevaron de la puerta de su casa del barrio Las Tejas (Corrientes) a las 23.30&nbsp;del 21 de septiembre de 2003. En 2005 se busc&oacute;&nbsp;su cuerpo en una isla perteneciente al Ej&eacute;rcito Argentino, ubicada muy cerca de Paso de Los libres, sin resultados. Y en noviembre de 2007 -siguiendo otra pista- se exhum&oacute;&nbsp;un cad&aacute;ver en el cementerio de la localidad paraguaya de Villa Elisa. Pero tampoco hubo &eacute;xito. No era &eacute;l. Esta vez parece ser diferente debido a que varios indicios confluyen en un mismo lugar.&nbsp;Por eso, y por lo d&iacute;ficil del terreno, es que se encar&oacute;&nbsp;un trabajo in&eacute;dito en la causa: vaciar el afluente de un r&iacute;o para que los antrop&oacute;logos puedan entrar a su lecho y trabajar tranquilos buscando restos &oacute;seos.&nbsp; Luego de dos intentos de encontrar alg&uacute;n resto usando perros, buzos t&aacute;cticos, rastrillos y sonares (primero en septiembre de 2018 y luego en abril de 2019) el Ministerio de Seguridad de la Naci&oacute;n -aun en manos de Patricia Bullrich- autoriz&oacute;&nbsp;la contrataci&oacute;n de una empresa argentina para que vaciara de agua el tramo del afluente donde se cree que estar&iacute;a Schaerer. Se pidieron precios a tres interesados y finalmente fue adjudicado el trabajo a una empresa de Paso de los Libres&nbsp;que cotiz&oacute;&nbsp;100.000 d&oacute;lares por toda la obra. Las m&aacute;quinas&nbsp;comenzaron a llegar la zona la semana pasada, con un golpe de suerte: las aguas -que dependen de los cambios del R&iacute;o Uruguay-&nbsp;estaban bajas. El plan de obra es sencillo: hacer un dique con tierra sacada de la misma &aacute;rea, vaciar unos 9.200.000 litros de agua y revisar el lecho del curso de agua. Pero para empezar los trabajos hizo falta toda una tarea de inteligencia policial previa y, sobre todo,&nbsp;la buena voluntad&nbsp;de las autoridades argentinas y brasile&ntilde;as. El fiscal federal de Corrientes Flavio Ferrini, con apoyo del fiscal Santiago Marquevich -titular de Unidad Fiscal Especializada en Secuestros Extorsivos (UFESE)-, logr&oacute;&nbsp;encarrilar un trabajo conjunto que incluy&oacute; un estudio de impacto ambiental,&nbsp;comenz&oacute; a gestarse en septiembre de 2018 y entr&oacute;&nbsp;a su etapa cr&iacute;tica hace apenas unos d&iacute;as cuando las excavadoras cruzaron al lado&nbsp;brasile&ntilde;o, importadas temporalmente por el Consulado argentino. Un testigo y una pala Cristian Schaerer era hijo de de Juan Pedro &quot;El Vasco&quot; Schaerer, ex ministro de Salud correntino quien en 1999 se afinc&oacute;&nbsp;en Paraguay luego de que la Justicia de su provincia&nbsp;pidiera su captura para que respondiera en&nbsp;varias causas por corrupci&oacute;n. Una teor&iacute;a sobre el secuestro del joven sostiene&nbsp;que Lohrmann lo eligi&oacute;&nbsp;como v&iacute;ctima porque se lo marcaron como miembro de una familia que pod&iacute;a pagar buen dinero por su rescate. Por eso, dicen,&nbsp;el primer pedido de rescate&nbsp;fue de&nbsp;cinco millones de d&oacute;lares. Rodolfo &#39;&#39;Ruso&#39;&#39;Lorhmann cay&oacute; en Portugal. Pero los rumores m&aacute;s extendidos hablan de cuentas pendientes entre &quot;El Ruso&quot; y Schaerer padre: un dinero que no lleg&oacute;&nbsp;a manos de Lohrmann como deb&iacute;a y por el que el asaltante y secuestrador incluso&nbsp;atent&oacute;&nbsp;contra &quot;El Vasco&quot;&nbsp;Schaerer en Paraguay. En esa oportunidad, a los&nbsp;tiros, quiso robarle 80.000 d&oacute;lares que llevaba encima. A Schaerer y Lohrmann algunos los se&ntilde;alan como socios en diferentes&nbsp;negocios ilegales, cosa que&nbsp;nunca se prob&oacute;. Aunque por el caso hubo dos juicio orales y 12 condenados, los principales implicados -Rodolfo Lohrmann y Horacio Maidana- lograron permanecer pr&oacute;fugos tanto tiempo que hasta se los lleg&oacute; a dar por muertos. Horacio &quot;Potrillo&quot; Maidana fue detenido en Portugal. Un testigo sorpresa Pero&nbsp;cuando ya nadie esperaba tener noticias de ellos, ambos cayeron presos&nbsp;en Portugal donde viv&iacute;an con identidades falsas y se dedicaban a asaltar joyer&iacute;as,&nbsp;bancos y blindados. Esto ocurri&oacute;&nbsp;en noviembre de&nbsp;2016 y su detenci&oacute;n&nbsp;reaviv&oacute;&nbsp;la esperanza de encontrar a Cristian. Casualidad o no,&nbsp;luego de&nbsp;que los fiscales Ferrini y Marquevich viajaran a Portugal a tomarles declaraci&oacute;n indagatoria,&nbsp;apareci&oacute;&nbsp;de sorpresa&nbsp;un testigo clave&nbsp;que aport&oacute; un relato para poder rastrear los restos de la v&iacute;ctima. El testigo en cuesti&oacute;n es brasile&ntilde;o y fue aportado por la Polic&iacute;a Federal de ese pa&iacute;s que colabor&oacute; en varias tareas de inteligencia en el caso. La raz&oacute;n de esta colaboraci&oacute;n: Schaerer estuvo cautivo bastante tiempo en Uruguayana y una parte de la log&iacute;stica para deshacerse del cuerpo parece haber estado en manos de caoneros dedicados el contrabando internacional a traves del R&iacute;o Uruguay. El lugar donde buscan el cuerpo de Cristian Schaerer, secuestrado en 2003. A&nbsp;cambio de la ubicaci&oacute;n exacta de los restos de Cristian -una informaci&oacute;n que ahora se intenta corroborar vaciando&nbsp;el arroyo-, el testigo reclam&oacute;&nbsp;el pago de la&nbsp;recompensa de un mill&oacute;n de pesos&nbsp;ofrecida por el Estado argentino. El tr&aacute;mite, claro, est&aacute; en curso y no&nbsp;se concretar&aacute;&nbsp;hasta tanto se corrobore si el dato es real. El brasile&ntilde;o declar&oacute;, int&eacute;rprete mediante, ante el fiscal Ferrini a fines de 2018 y cont&oacute;&nbsp;una historia que, aunque tiene baches, coincide con otros elementos de la causa. Seg&uacute;n &eacute;l, en el a&ntilde;o 2005 -cuando la Gendarmer&iacute;a y la Polic&iacute;a Federal Argentina comenzaron a buscar&nbsp;a Cristian en una isla del Ej&eacute;rcito Argentino, cerca de Paso de los Libres- la banda se puso nerviosa y decidi&oacute;&nbsp;cambiar el cuerpo del lugar&nbsp;donde lo hab&iacute;a enterrado. El testigo cont&oacute; lo ocurrido&nbsp;como si alguien se lo&nbsp;hubiese narrado y no fuera &eacute;l su protagonista. Pero por la cantidad de detalles del relato de esta tercera persona parece inventado para no incriminarse. El lugar donde buscan el cuerpo de Cristian Schaerer, secuestrado en 2003. De acuerdo al testigo, un canoero (que no es &eacute;l) fue contratado para cambiar a Cristian de su tumba original ubicada&nbsp;un metro bajo tierra, en un islote pr&oacute;ximo al arroyo en el que se lo busca hoy, siempre del lado de Uruguayana. Los restos de Schaerer fueron desenterrados, puestos en&nbsp;una bolsa de arpillera y trasladados unos pocos kil&oacute;metros. Finalmente se los arroj&oacute;&nbsp;en el afluente del arroyo Imboa, que no tiene una correntada importante. La declaraci&oacute;n tiene puntos oscuros pero se corresponde con otros indicios de la causa. En el lugar marcado por el hombre se hicieron rastrillajes&nbsp;inmediatamente. Se usaron perros y&nbsp;buzos de Gendarmer&iacute;a que trabajaron&nbsp;con apoyo de buzos del Cuerpo de Bomberos Militar de R&iacute;o Grande do Sul. A ciegas, por&nbsp;la poca claridad del agua, &eacute;stos usaron un sistema de ir buscando al tacto, por sectores, anclando boyas y revisando en forma conc&eacute;ntrica en el fondo, al tacto. Vac&iacute;an el afluente de un r&iacute;o para buscar a Cristian Schaerer. En el agua no se hallaron restos humanos, pero en los m&aacute;rgenes se encontr&oacute;&nbsp;el extremo met&aacute;lico de una pala y partes de una bolsa&nbsp;de arpillera, ambos elementos coincidentes con la descripci&oacute;n del testigo de identidad reservada. Adem&aacute;s, personal de Gendarmer&iacute;a reconstruy&oacute;&nbsp;a pie el camino entre el supuesto lugar de entierro primario&nbsp;y el lugar donde se habr&iacute;an arrojado los restos. Y no encontr&oacute; incongruencias en el relato. Era perfectamente posible hacer ese tramo a pie. Aunque en la declaraci&oacute;n no se menciona a Rodolfo Lohrmann, la declaraci&oacute;n viene a completar&nbsp;la historia que ya hab&iacute;a contado&nbsp;en su momento N&eacute;stor Horacio Barczuk, miembro de la banda y condenado a 25 a&ntilde;os de prisi&oacute;n por el Tribunal Oral Federal de Corrientes el 14 de junio de 2007. Vac&iacute;an el afluente de un r&iacute;o para buscar a Cristian Schaerer. Seg&uacute;n el fallo del Tribunal, Cristian &quot;fue sacado de la Argentina con destino a Uruguayana (Brasil). El traslado fue primero en bote (cruce de un riacho), una lengua de tierra en la que la persona que los guiaba llevaba sobre sus hombros a la v&iacute;ctima, y luego en una lancha a motor para cruzar el R&iacute;o Uruguay&quot; hasta Brasil. Cristian estaba en Uruguayana cuando su madre pag&oacute; el rescate, el 6 de noviembre de 2003 en Ciudad del Este, Paraguay. Tres d&iacute;as despu&eacute;s del cobro, seg&uacute;n Barczuk, Cristian fue sacado de la casa donde lo ten&iacute;an cautivo y&nbsp;&nbsp;llevado a una bajada del rio Uruguay cercana al puente y a una villa miseria (Proficar). All&iacute;&nbsp;Lohrmann lo meti&oacute; en un bote o lancha y se lo llev&oacute;. Esa fue la &uacute;ltima vez que lo vio con vida. Se cree que apenas vivi&oacute; unas horas m&aacute;s. &quot;Lo llevaron a Cristian Schaerer a orillas del r&iacute;o. Nos bajamos caminando por una villa, siempre en Uruguayana, y ah&iacute; hab&iacute;a una lancha esperando. Cristian estaba maniatado y con la cabeza cubierta por una capucha. Me apenaba mucho verle en esa situaci&oacute;n y cada momento preguntaba: &#39;&iquest;Me van a matar?&nbsp;&iquest;Por qu&eacute; me van a matar? Por favor, no me hagan da&ntilde;o&#39;, cont&oacute; Barczuk en el libro &quot;Secuestro en Paraguay&quot;, del fiscal de ese pa&iacute;s Rafael Fern&aacute;ndez, quien intervino en varios secuestros que&nbsp;la banda de Lohrmann concret&oacute; en tierra guaran&iacute;. &quot;Rodolfo Lohrmann le tom&oacute; del hombro para tranquilizarlo y le dijo: &#39;Hijo, no tengas miedo; esto se va a solucionar r&aacute;pido&#39;. Cuando yo escuch&eacute; eso, me puse un poco m&aacute;s tranquilo, porque, para serle sincero, en un momento dado pens&eacute; que esa noche le har&iacute;an da&ntilde;o. Luego se subieron todos a la lancha. A m&iacute; me dejaron el veh&iacute;culo en cuesti&oacute;n y ya no supe d&oacute;nde lo llevaron&quot;, agreg&oacute; el hombre que fue el &uacute;ltimo cuidador de Cristian Schaerer. Los &uacute;ltimos d&iacute;as de la v&iacute;ctima El 21 de septiembre de 2003, alrededor de las 23.30 hs, Schaerer estaba por entrar a su casa del barrio Las Tejas, en Corrientes, en su viejo Mercedes Benz, cuando cuatro hombres a bordo de un Fiat Duna lo interceptaron y se lo llevaron. Cristian no grit&oacute;, no se resisti&oacute;. La escena fue vista por un vecino al que Lohrmann amenaz&oacute;&nbsp;para&nbsp;que se volviera a meter en su vivienda. Pocos minutos despu&eacute;s de la captura, los secuestradores cambiaron de auto y se subieron a un Chevrolet Corsa. Con ese veh&iacute;culo&nbsp;fueron hacia el sur y luego se adentraron&nbsp;en la provincia de Corrientes hasta un galp&oacute;n ubicado en el kil&oacute;metro 7,4 de la ruta nacional 118. En ese lugar, una casilla precaria, Cristian permaneci&oacute; dos d&iacute;as. El 24 de septiembre los secuestradores lo movieron: se lo llevaron a Paso de los Libres, donde lo retuvieron aproximadamente 15 d&iacute;as en una chacra ubicada en el cruce&nbsp;de la calle Ernesto Montiel y la ruta 117, para luego llevarlo a una casilla del &ldquo;Paraje Ombucito&rdquo;. La banda estuvo varias veces a punto de ser interceptada. Incluso aun hoy los investigadores sostienen que, antes de que lo trasladaran a Brasil, Cristian&nbsp;estuvo a punto de ser rescatado&nbsp;en un operativo de la Polic&iacute;a Federal. Sin embargo, todo se frustr&oacute;&nbsp;porque los secuestradores contaban con la colaboraci&oacute;n del sargento de la PFA Miguel Angel Ram&iacute;rez (condenado) que trabajaba en la Delegaci&oacute;n Paso de los Libres y les avisaba de los movimientos de b&uacute;squeda. La principal hip&oacute;tesis es que Cristian fue asesinado por Lohrmann en Brasil&nbsp;poco despu&eacute;s del cobro del rescate, dinero que la banda, dicen, se reparti&oacute;&nbsp;en un hotel de Curitiba. Vac&iacute;an el afluente de un r&iacute;o para buscar a Cristian Schaerer. Pero &quot;El Vasco&quot; Schaerer varias veces expuso su propia teor&iacute;a de lo ocurrido, seg&uacute;n la cual Lohrmann mantuvo al chico vivo muchos meses&nbsp;m&aacute;s para intentar cobrar un segundo rescate y finalmente &quot;lo vendi&oacute; a otra organizaci&oacute;n&quot;&nbsp;de narcotraficantes&nbsp;para que ellos cerraran el negocio. &quot;El Vasco&quot; cont&oacute;&nbsp;a&nbsp;T&eacute;lam, en una entrevista realizada a mediados de 2017,&nbsp;que Cristian&nbsp;habr&iacute;a estado retenido&nbsp;en una quinta de Paso de los Libres has&shy;ta los primeros meses de 2004. Luego estuvo cautivo entre marzo y mayo del 2004 en un ase&shy;rradero de Garup&aacute;, Misio&shy;nes, propiedad de Carlino Rojas Morel. Finalmente se&nbsp;lo traslad&oacute; desde Misiones a Paraguay a bordo de una Renault Trafic hasta que termin&oacute; en una casa de Edelira, en el departamento paraguayo de Itapu&aacute;. <p style="text-align: center;">FUENTES: FISCALIA FEDERAL DE CORRIENTES - CLARIN <p style="text-align: center;">&nbsp; &ldquo;Yo estuve muy cerca de recuperarlo y&nbsp;no me voy a perdonar&nbsp;no haber dado el paso necesario para eso. Entre todos los operativos que realizamos con la Po&shy;lic&iacute;a paraguaya y la fiscal&iacute;a antisecuestro de Paraguay, estuvo uno en donde estu&shy;vimos en un lugar, frente a la toma de agua de la Pape&shy;lera Misiones, donde hab&iacute;a tres casas&rdquo;, agreg&oacute; el padre de Cristian. &quot;En dos de ellas encontramos a parte de la banda y logra&shy;mos obtener informaci&oacute;n respecto a las &uacute;ltimas horas de Cristian, pero la tercera casa estaba toda cerrada y tapiada y uno de los inte&shy;grantes del grupo dijo que estaba abandonada, por eso no la revisamos.&nbsp;Mi hijo se encon&shy;traba ah&iacute;, a 30 metros de donde nosotros est&aacute;ba&shy;mos&rdquo;. La teor&iacute;a del padre de Cristian -que incluye la protecci&oacute;n de narcos paraguayos y brasile&ntilde;os a la banda de Lohrmann-&nbsp;nunca pudo ser corroborada. Los datos m&aacute;s concretos sobre los &uacute;ltimos d&iacute;as de la v&iacute;ctima la ubican en Uruguayana, sobre el margen del R&iacute;o Uruguay, con una capucha en la cabeza&nbsp;subiendo a una lancha con &quot;El Ruso&quot; Lohrmann y pregunt&aacute;ndole si lo iba a matar. EMJ